Seguro que lo ha oído alguna vez: "Las plantas de interior purifican el aire". Tal vez lo haya leído en la etiqueta de una planta o se lo haya dicho un entusiasta amante de las plantas. La idea de que tener unas cuantas amigas verdes en casa mejorará drásticamente la calidad del aire es obstinadamente popular. Pero, ¿cuál es la realidad? ¿Qué dice la ciencia sobre las plantas como purificadoras del aire? Y lo que es más importante, ¿debería decepcionarse si ese cuento de hadas resulta no ser cierto?
¿Qué dice la ciencia?
La historia de las plantas purificadoras del aire tiene su origen en un famoso estudio de la NASA de 1989. En este estudio, la NASA probó lo bien que ciertas plantas podían eliminar del aire contaminantes como el benceno y el formaldehído. Y Si, algunas plantas eran capaces de absorber estas sustancias, pero en condiciones muy artificiales, en espacios cerrados con circulación de aire controlada.
En una casa normal, la cosa cambia. Estudios más recientes muestran que se necesitarían cientos de plantas por metro cuadrado para obtener un efecto medible en la calidad del aire. En un estudio general de 2019, los investigadores llegaron incluso a la conclusión de que "aunque las plantas de interior pueden purificar el aire en condiciones controladas, no son eficaces como filtros de aire en espacios habitables reales."
En otras palabras, suena bien, pero en la práctica el efecto es insignificante.
Por qué las plantas siguen siendo valiosas
Puede que ahora estés pensando: "Entonces, ¿para qué voy a meter plantas en casa?". Pero eso es lo bonito: las plantas tienen valor por muchas otras razones, y son igual de importantes.
1. Las plantas aportan paz y relajación
Numerosos estudios demuestran que observar plantas puede reducir el estrés, calmar el ritmo cardíaco e incluso mejorar la concentración. El mero hecho de cuidar de las plantas puede ser un ritual tranquilizador en una vida ajetreada.
2. Mejoran la humedad
Las plantas evaporan agua a través de sus hojas, contribuyendo a una humedad más agradable en la casa. Especialmente en invierno, cuando la calefacción reseca el aire, esto puede marcar la diferencia en tu piel, vías respiratorias y confort general.
3. Dan más vida a tu hogar
Las plantas aportan ambiente, color y vida a tu hogar. No sólo embellecen una habitación, sino que también te hacen sentir más cómodo en tu propio entorno.
4. Dan sensación de pertenencia
Tanto si cuidas con cariño una planta como si mantienes una jungla entera, las plantas estructuran tu día y te ofrecen una sensación de cuidado y responsabilidad, algo que beneficia tu bienestar mental.
Ama las plantas por las razones correctas
Está bien que las plantas te parezcan bonitas, relajantes o atmosféricas. No necesitas una excusa científica para llenar tu casa de vegetación. Las plantas son valiosas incluso sin ser filtros milagrosos. Así que olvídate del mito de la planta "purificadora del aire": tus plantas ya son suficientemente especiales.
